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miércoles, 29 de febrero de 2012




En estos meses de "ausencia" eran muchos los días que me retiraba a la soledad de los montes a meditar. Y era en el Silencio de las cumbres y los pequeños valles ocultos, donde me buscaba a mi mismo.

Pero aquel ser me dijo un día:
Aquéllos que buscan el Silencio en la calma nunca lo encontrarán desnudo. Para desnudarlo hay que buscarlo entre el bullicio. ¿De qué sirve a un corazón tener calma en medio de la soledad?¿Acaso no es como la calma que tiene un río cuando riega un valle? Más ¡que grande es un corazón cuando en medio de la alteración conserva la calma y se viste con el Silencio! Es como el torrente que resbala sereno por la falda de la montaña.
Muchos van a lugares donde lo más que les molesta es el canto de un pajarito, o el ritmo que arranca la brisa a las hojas de los árboles. Y decís: Estoy tranquilo y sereno en este lugar, ya he alcanzado la calma y el Silencio es el amigo de mi corazón.
Pero cuando venís al bullicio, nuestros corazones se agitan y nuestros pulsos se alteran; y nuestros pensamientos chocan violentamente en nuestras frentes. Y yo les diría: ¿Dónde guardastes la calma? ¿Que morada le preparastes en nuestros pechos que tan pronto se fue de nosotros?
Mira que aquél que busca el Silencio Interior lo encuentra en medio de los ruidos y de las voces y de los gritos; y tomándolo lo sienta en su corazón, y al escucharlo ya no oye hacia fuera sino hacia dentro.
Y en verdad les digo, que ni una tormenta ni el galope de cien caballos podría separarlo de él.
Para buscar, pues, la calma interior no se vayan donde todo es calma. Vayan donde no hay calma y sean  ustedes la calma. De esta forma la encontraran al darla y la tendran en el grado en que veas que otros la necesitan de ustedes para calmarse.



ULTIMO DIA DE FEBRERO,SE TERMINO LA LIBERTAD.COMIENZA EL AÑO,DISFRUTENLO.

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